Prácticas de producción sostenibles
El liderazgo ambiental en la industria se refleja en el compromiso del fabricante con prácticas de producción sostenibles. Utilizando equipos de fabricación eficientes en energía, recicla más del 90% de los materiales de producción e implementa programas de reducción de residuos que, aunque no son suficientes para garantizar cero residuos, contribuyen significativamente. Para compensar el consumo de energía, han invertido en sistemas de energía solar y emplean sistemas de reciclaje de agua como parte integral de sus procesos de producción. Sus políticas de compra son estrictamente ambientales, y trabajan directamente para reducir la huella de carbono de su cadena de suministro. Los esfuerzos por reducir los residuos no solo minimizan, sino que también mejoran la eficiencia de la producción, ahorrando recursos y promoviendo operaciones más responsables desde el punto de vista ambiental. Esto es posible al implementar principios de fabricación enana que conectan las líneas de producción en un flujo continuo, lo que reduce los costos totales (incluida la producción de residuos) en comparación con los métodos tradicionales basados en líneas, sin comprometer ni la calidad ni la cantidad de la salida del producto, ya que llegan menos productos terminados a los clientes debido a defectos a lo largo de la línea.